jueves, 2 de septiembre de 2010

Taller 2. Julio César Benítez Benítez

TRABAJO ELABORADO POR JULIO CÉSAR BENÍTEZ BENÍTEZ


TALLER No 2


Materia:
Currículo



Facilitadora:
Luz Marina Yepez



Fundación Universidad Católica del Norte
Medellín, Agosto 31 de 2010


INTRODUCCIÓN:
La labor del docente no solamente consiste en preparar las clases y compartirlas con sus estudiantes, sino que esta va más allá, pues, nosotros somos responsables de colaborar para el desarrollo de un buen currículo que atienda a las necesidades educativas de la región en la cual nos encontramos.
En el presente trabajo me enfoco en el análisis de las necesidades, intereses y problemas que puedo observar en el ámbito educativo de la institución para la cual trabajo y de un sector de la población de Medellín.
Espero que el contenido de este trabajo ayude a encontrar caminos que propicien la solución para estos problemas y necesidades.
Siendo que soy profesor de teología protestante y trabajo para una institución de capacitación teológica, entonces me enfocaré en este aspecto.

1. Observación del entorno.
Trabajo en el Instituto Bíblico Reformado de Colombia en la ciudad de Medellín y nuestro público beneficiado son los pastores y creyentes de corriente cristiana protestante.
Son muchas las necesidades que puedo observar en el ámbito educativo teológico de esta ciudad.
Con gran preocupación puedo observar cómo muchos pastores y líderes protestantes de la ciudad carecen de una buena preparación teológica, filosófica y ministerial. Una gran mayoría de estos ministros religiosos han adelantado estudios teológicos en los muchos institutos bíblicos que se ofrecen en el Valle del Aburrá, pero estos institutos no responden realmente a la necesidad de formación de estos hombres, sino que se concentran en dar una serie de contenidos religiosos no bien estructurados ni tendientes a responder a las necesidades reales de la comunidad cristiana protestante de esta ciudad.
Primero que todo no se cuentan con docentes capacitados para esa labor. Se requiere que los docentes sean personas preparadas en el campo teológico, filosófico y pedagógico. Una buena parte de los profesores de estas instituciones no han realizado cursos de pedagogía y desestiman la importancia de la filosofía en la labor ministerial.
En segundo lugar veo que el currículum es incompleto y no se concentra en dar una formación integral de acuerdo a las necesidades reales de la comunidad cristiana y las demandas de la sociedad postmoderna. El pensum de la mayoría de estas instituciones solo atiende a capacitar en el área bíblica, y de manera somera trata asuntos relacionadas con el área pedagógica, filosófica, epistemológica y psicológica.
En tercer lugar observo que en los institutos bíblicos locales no se toma en cuenta las necesidades del mundo postmoderno. Su currículo no se enmarca en un estudio concienzudo de la situación religiosa actual, de la formación que deben tener los pastores. El mundo ha cambiado mucho en los últimos años y las personas cada vez adelantan estudios universitarios, lo cual implica que los pastores deben ser persona que manejen conocimientos integrales de muchas ciencias, de manera que en su labor educativa o de consejería a los feligreses pueden tener, aunque sea una idea somera, de las distintas profesiones que identificaran a los miembros de las iglesias. Los problemas que los jóvenes presentan hoy son muy graves: drogadicción, falta de amor de parte de sus padres, “pandillismo”, y esto hace necesario que los ministros religiosos tengan conocimiento de esta problemática.

En cuarto lugar observo que la mayoría de estos institutos no se interesan en desarrollar planes de mejoramiento que permitan elevar el nivel académico de los mismos.
Concentrándome específicamente en el Instituto Bíblico para el cual trabajo veo algunas necesidades urgentes:
- Necesidad de desarrollar un plan curricular que responda realmente a las necesidades de la población evangélica de la ciudad, especialmente de los pastores. Se requiere hacer una autoevaluación institucional, la cual nunca se hizo, y bajo el consenso de los docentes, directivos y estudiantes, establecer un currículo idóneo para esta población de la ciudad.
- Necesidad de formar a los profesores en pedagogía, currículo, didáctica, uso de las Tics, entre otros.
Respecto a los intereses de la institución, creo que siendo su enfoque el mejorar la formación teológica de los pastores, entonces se requiere contar con profesores mejor preparados. Asimismo se deben usar libros y materiales mejor estructurados desde un punto de vista pedagógico, de manera que los estudiantes sean guiados de manera efectiva en un proceso de formación mas fácil.

2. “Currículo Oculto” y “Currículo Latente” en las instituciones que conozco.
Siendo que me desempeño en el IBRC, entonces hablaré sobre esta institución.
Respecto al “currículo oculto” puedo mencionar dos categorías: una positiva y otra positiva.
Positivamente podemos decir que nuestros estudiantes están siendo sanamente influenciados a través del ejemplo de los profesores y la misma institución. Considero que muchos de nuestros estudiantes eran muy descuidados en sus responsabilidades personales y de manera especial eran indisciplinados. Las exigencias de los estudios y el ejemplo de los profesores les ha ayudado a ser mas responsables y ahora son mas organizados en el manejo y la administración de su tiempo. Aunque no tenemos una materia que se titule “la administración del tiempo”, creo que esto lo aprenden los estudiantes en el trato diario con los profesores y la institución.
Hemos visto como nuestros estudiantes van cambiando su forma de pensar y actuar, adaptándola a los altos valores de la moral cristiana, y en esto ha sido importante la vida de los docentes. No tenemos clases específicas sobre esos temas, pero el estudiante aprende mucho de la vida de nuestros profesores: cómo tratar a la esposa, cómo enfrentar las dificultades, cómo manejar los asuntos de la honestidad, cómo ser buenos ciudadanos, aprenden a respetar las autoridades, a obedecer las leyes.
Pero lastimosamente hay un aspecto negativo que tiende a ser muy fuerte. Lo que puedo ver es cierta manipulación a través de la influencia que ejercen los profesores. Aunque somos una institución teológica de carácter protestante, no obstante existen diferentes vertientes teológicas dentro del protestantismo, y aunque en nuestros propósitos como institución se encuentra estipulado que los profesores deben respetar las distintas expresiones teológicas y no se debe influenciar para atraer adeptos a sus posturas personales, la verdad es que los docentes aprovechan los espacios educativos para, poco a poco, convencer a los demás de sus distintivos personales y ganar grupos de seguidores.
Al analizar todo esto puedo llegar a las siguientes reflexiones:
- El “currículo oculto” y el “currículo latente”, aunque no se incluyen en el PEI o los planes curriculares de las instituciones, necesariamente debe ser tenido en cuenta, ya que, a la par con los contenidos curriculares abiertos o visibles, forma parte de la enseñanza, de la educación, de la formación de los estudiantes. Incluso, en los asuntos vitales, en los asuntos que serán de gran utilidad para el desarrollo personal de los alumnos, el currículo oculto será más influyente. De allí que sea necesario que las instituciones desarrollen planes curriculares donde conciban la importancia de este currículo oculto o latente.
- Siendo que los docentes estamos influenciando, consciente o inconscientemente a nuestros estudiantes en asuntos como la moral, los valores, la forma cómo enfrentan los asuntos de la vida, sus deseos más altos, entonces debemos ser concientizados de nuestra enorme responsabilidad social. Los docentes somos llamados a ser ejemplos a los estudiantes, pero buenos ejemplos. La forma cómo hablamos, la forma cómo pensamos, la forma cómo respondemos ante las situaciones adversas, todo esto influenciará a nuestros pupilos.

3. Dos fichas RAE

TEMA: ¿Examinamos a nuestros estudiantes o no?
AUTOR: Miguel Erasmo Zaldívar Carrillo Odiseo.
FUENTE: Revista electrónica de pedagogía. Extraído de: http://www.odiseo.com.mx/bitacora-educativa/examinamos-nuestros-estudiantes-o-no en Agosto, 26, 2010
AÑO: 2010

RESUMEN:
El autor analiza las ventajas que ofrecen las evaluaciones escritas o exámenes cuando estos son bien estructurados y usados idóneamente por un diestro maestro. Analiza la importancia de la familia en el acompañamiento de los estudiantes, dándole fuerzas y ánimo cuando no le va bien en algunas pruebas.

PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN
El autor resolvió preguntas muy importantes relacionadas con el tema: ¿Son válidos los exámenes para evaluar a los estudiantes? ¿Se deben usar los exámenes como un medio de represión o castigo sobre los estudiantes indisciplinados? ¿qué papel cumple la familia en el acompañamiento de los estudiantes al presentar sus evaluaciones?

PRINCIPALES CONCEPTOS
La aplicación de pruebas fueron usadas por muchos psicólogos para medir el coeficiente intelectual de los niños.
Esta finalidad para las pruebas son antipedagógicas y limitadoras del desarrollo de la humanidad.
Detrás de los exámenes se encuentran muchas presiones sociales, ya que la calidad de la educación se mide por ellos, o la idoneidad de los profesores o la inteligencia de los estudiantes.
Los exámenes deben ser elaborados directamente por los profesores, no por otras personas.
La función más importante de los exámenes es la de diagnostica las potencialidades de los estudiantes, con el fin de determinar el trabajo pedagógico a seguir en el proceso formativo.
Si las escuelas primarias trabajan bien, entonces todos los estudiantes deberían ser promovidos al siguiente grado académico.
El fracaso en un examen es un motivo fuerte para que la familia trabaje unida en torno a la formación de su hijo o hija.

METODOLOGÍA
Esta investigación se enfoca en demostrar la necesidad de las pruebas o exámenes en la labor educativa. Para ello acude a ciertas investigaciones que él y otros han realizado.

RESULTADOS
El desarrollo de un examen, que por su adecuada concepción garantice para su solución una intensa actividad intelectual de los estudiantes, genera un proceso de reestructuración de los conocimientos, impactando de manera muy especial en la metacohnición cognitivas e instrumental de los estudiantes.

3 comentarios:

  1. Saludos Julio, creo que nos encontramos en una línea parecida, la verdad es que con la ley 133 las iglesias tienen que poner en serio el tema de la capacitación de los ministros de culto, mas cuando un ministro de culto es un personaje público que educa a otros, las instituciones educativas teológicas deben funcionar como cualquier institución educativa que apunte a estar a la vanguardia en lo que se refiere a la directriz de la ley general de educación. Saludos para todos. Cesareo desde Cali

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  2. Julio, es interesante el comentario que haces e igual el de Cesareo, si son Instituciones que forman deben pensar en una estructura educativa.
    Es importante recordar que el currículo latente, escondido y oculto da cuenta del tipo de hombre que se quiere formar, respondiendo a posibles soluciones de las problemáticas socioculturales, diagnosticadas previamente en el PEI. La Misión, Visión y principios filosóficos rigen el manual de convivencia, los lineamientos curriculares del plan de estudio y proyectos transversales que son requeridos como elementos de complementación según la ley general de educación y los NIPs, Necesidades, intereses y solución de problemas de las comunidades.
    Faltó la evidencia de imágenes para ilustrar el trabajo.
    Las fichas RAE, aporta a la profundización temática de la unidad.
    Lo felicito por asumir el reto de hacer uso de los recursos que ofrece la web 2.0 para el aprendizaje.

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  3. Estoy de acuerdo con los comentarios anteriores y deseo aportar lo siguiente: todos los que de alguna manera trabajamos para ayudar a la sociedad debemos tener una buena preparación, ya que la mente humana se expone a ser receptiva de los mensajes que transmitimos. Los pastores de cualquier denominación religiosa deben ser personas altamente capacitadas ya que su labor les exige mucho conocimiento tanto teológico como social.

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